Observación del eclipse de Luna, 28/09/2015

Han pasado ya unos días desde el eclipse de Luna, pero las hermosas imágenes de nuestro satélite continúan en nuestra memoria (y si somos algo olvidadizos no tenemos más que meternos en Facebook o Twitter para recibir una auténtica avalancha de fotos 🙂 ) Hemos tenido una gran suerte de poder disfrutar de un cielo totalmente despejado y una atmósfera completamente limpia, al menos en Madrid se dieron todos los factores para disfrutar del fenómeno a lo grande. Aquí os hago un resumen de cómo lo vivimos.

eclipseluna

La tarde del domingo me fue imposible dormir. Quería hacerlo, pero no podía, estaba ilusionado como un niño pequeño, la emoción me comía por dentro. ¡Tenía que aguantar toda la noche despierto! ¡Venga hombre, duérmete un poco! Pero no hubo manera, ni con tila ni nada. Después de comprobar que todo el material estaba preparado cargué el coche y nos fuimos para Cubas, a las afueras de Madrid (después de cenar algo con la familia en Torrejón de la Calzada, que hay que ir con energías). Al llegar al lugar de observación a eso de las 00:00 ya había algunos compañeros allí e incluso tenían los telescopios montados.

Después de charlar un rato monté mi equipo. Me había llevado el Newton porque la focal es perfecta para fotografiar la Luna, pero también me llevé el TS65 por si acaso, aunque al final no lo usé. El montaje fue sencillo, nada de autoguiado. Y como acabé antes de tiempo me puse a jugar un rato con la cámara y la Luna.

Hocus Pocus
No es un montaje, la luz de la Luna se proyecta a través del ocular y da mucho juego para hacer composiciones divertidas.

La luz de la Luna iluminaba todo el entorno con un brillo casi mágico. Pasaban los minutos y cada vez estábamos más nerviosos. ¡Faltan 15 minutos para que entre en la penumbra! ¡10! ¡5! ¡Ahora vienen los cuartos …. 🙂 ! Comenzó el eclipse y empezamos a hacer fotos a la Luna y a observarla por el telescopio y con prismáticos. Al principio no se notaba nada aunque viendo las fotos había un muy tenue oscurecimiento. Según pasaban los minutos parecía que el brillo de la Luna disminuía, se apreciaba un mayor contraste en los mares, fue uno de los fenómenos que más me sorprendió. A las 03:07 comenzó la entrada en la sombra. Un mordisco oscuro empezaba a devorar la Luna por la parte superior izquierda y avanzaba lentamente. A las 04:11 comenzaba la totalidad. La Luna adquiría una tonalidad rojiza por la dispersión de la luz solar que pasaba por la atmósfera terrestre y llegaba hasta nuestro satélite. Aquí fue donde el espectáculo adquirió unas dimensiones realmente surrealistas. La Luna parecía iluminada desde dentro con una esquina iluminada – ¡Parece una bellota! – Exclamaba alguien. A mi me parecía una lámpara de globo suspendida en un techo descomunal. Es como si el Circo del Sol estuviera actuando en una carpa gigante y de repente un payaso fuese a salir de la Luna de cartón. Poco a poco el cielo se llenaba de estrellas -¡Mirad Orión! ¡Y las Pléyades! – A medida que nos acercábamos al máximo oscurecimiento la Luna se parecía más a Marte, color rojizo y zonas de valles y planicies. La sensación de tridimensionalidad y profundidad era evidente, es muy raro ver una Luna llena y percatarse de esa sensación de profundidad.

Eclipse de Luna
Durante la totalidad se pueden apreciar estrellas alrededor de la Luna, un momento mágico.

A través del ocular del telescopio la Luna aparecía rodeada de estrellas, era algo sobrecogedor. Pero no podía despistarme mucho de mi ordenador porque tenía que andar variando la exposición constantemente para no saturar la imagen y poder sacar el mayor detalle. La constante variabilidad de la luminosidad del fenómeno dificultaban la tarea y no quise dejar la cámara en modo AV por si algo salía mal. Pasada la fase de máximo oscurecimiento a las 4:45 un café vino estupendamente. Todavía quedaba la mitad del eclipse… ahora disfrutaríamos del espectáculo a la inversa.

Poco a poco la Luna recuperó su brillo habitual, las estrellas fueron desapareciendo y finalmente el brillo de la luz de la Luna lo inundó todo nuevamente. Con las primeras luces del alba, Venus ya bastante alto y Marte y Júpiter siguiéndole llegó el momento de recoger todo el material y volver a casa. mosaicohorizontal

Sin duda una noche que permanecerá para siempre en nuestro recuerdo ¡Y que noche!

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