Tenía pendiente esta entrada desde hacía varias semanas pero aprovechando que este blog cumple hoy 6 años vamos a celebrarlo con una presentación: mi «nuevo» SC5 para observación casera.
Hace un par de meses vendí mi veterano ETX70 con el que tan buenos momentos he pasado, astroescapadas a casas rurales, vacaciones en la playa, eclipses solares, observaciones públicas en colegios… sin duda un equipo bien amortizado, con un rendimiento muy bueno para su precio y facilidad de transporte y uso. Pero se me había quedado corto y el cuerpo me pedía algo «más guerrero» pero que pudiera seguir transportando con facilidad. Ahí comencé una investigación particular que derivó en este artículo que escribí sobre telescopios transportables.
Durante semanas estuve consultando foros de compraventa y preguntando a amigos. El presupuesto era reducido ya que solo podía invertir lo recaudado de la venta del ETX70 y un poco más de dinero adicional. Al poco tiempo un amigo de Valencia contactó conmigo para decirme que tenía un Nexstar 5 que no usaba, así que aprovechando que pasé la nochevieja en Altea nos pasamos por allí. El telescopio era un Nexstar «de la vieja escuela», de los made in USA (año 2006), con la montura de acero, nada de los plásticos que traen ahora. Mi amigo me comentó que tenía un par de handicaps, una holgura en el eje de altitud y signos de haber sido retirada en algún momento la lámina Schmidt para limpiar el espejo. Lo sacamos al patio de su casa para probarlo y estuvimos viendo la Luna y Orión. A pesar de no estar aclimatado ni colimado la imagen era aceptable y el precio muy ajustado. No incluía trípode, buscador ni diagonal, pero tampoco era un problema. Así que adopté este pequeño para darle una segunda vida.
Ya en Madrid me dispuse a ponerle los accesorios que faltaban. Gracias a un par de «angeles de la guarda» conseguí la diagonal de 1,25″ y el trípode. Para el buscador usé el de punto rojo del SC8 que compré el año pasado ya que en éste uso un buscador 8×50 más preciso. Le puse también unos bob’s knobs para colimar de forma sencilla y ¡voila! He tenido oportunidad de probarlo con Júpiter alguna noche pero a través del climalit de casa ( demasiado frío fuera y la calefacción puesta en casa crea mucha turbulencia si abro la ventana). Hoy la Luna se mostraba muy bonita así que he cogido el móvil y le he hecho esta foto directamente sobre el ocular.
Se trata de un equipo un poco más pesado de lo que buscaba, pero de tamaño ajustado por lo que puede transportarse con facilidad. El mando, por su antigüedad no es actualizable y hay algunas opciones que se echan en falta, pero tampoco supone mayor problema. Espero poder darle mucho uso. Tengo como tarea pendiente construirle un filtro solar con la lámina Baader, pero de eso ya hablaré en otro hilo.