Ayer, mientras estaba en el atasco de camino al trabajo consulté el correo electrónico y uno de los mails llamó especialmente mi atención ¡Una de mis fotografías había sido seleccionada como Amateur Astronomy Picture of the Day (AAPOD)! Una gran emoción se apoderó de mí, una ilusión tremenda después de varios intentos y mucha envidia sana, no me avergüenza reconocerlo, por mi parte con respecto a otros compañeros de afición que anteriormente habían obtenido este reconocimiento. Al fin y al cabo, no hay premio material asociado, tan solo es una foto publicada en una página, ni siquiera es un APOD, pero da igual, hace mucha ilusión verla ahí, la verdad sea dicha.
Así que aprovechando la noticia os comento como obtuve la foto, y os hablo un poco de mis vacaciones, que este año no he comentado nada.
El RETO
Era mi primera noche de vacaciones en Altea, donde suelo ir de vez en cuando a descansar. Este año me había llevado todo el equipo: Newton 150/750, cámara réflex, equipo de autoguiado… hasta me compré un rollo de cable de 50metros para conectar el ordenador desde la explanada de la piscina al enchufe más cercano. Esa noche había muy mal seeing, nubes altas, viento, bastante humedad y una Luna en fase muy avanzada. No obstante monté el telescopio en la terraza del apartamento con la intención de observar un poco la Luna y tomar alguna foto. Después de pasearme en visual por su superficie decidí conectar la cámara Canon y hacer unas pruebas de captura de video con el software que recientemente había adquirido: Backyard EOS. Tomé unos cuantos vídeos justo a tiempo antes de que las nubes cubrieran totalmente la Luna.
Al día siguiente procesé los videos con Registax y Photoshop y confeccioné una imagen de tipo mosaico a la que saturé ligeramente los colores. Destaqué los cráteres más importantes ( que procesé en videos por separado ) y al gustarme el resultado final decidí enviar la foto al AAPOD con no muchas esperanzas, la verdad. Publiqué la foto en un par de foros y ahí quedó la cosa…hasta ayer. 🙂
Esa jornada de observación fue de lo poco que pude hacer de astronomía este año en mis vacaciones. Una humedad altísima, la avería de mi cámara de autoguiado (que también utilizaba para planetaria antes de comprarme la DMK) y una contaminación lumínica en aumento en la zona hicieron que desistiera de practicar más astronomía en el resto de las noches. Aun así cundió bastante. Los detalles de la foto los podés encontrar en mi web de astrofotografía.